Y eso no fue todo, en el rentado nacional Santa Fe domino de principio a fin el todos contra todos, impuso un fútbol directo que buscaba los 3 puntos sin importar el campo donde se estuviera jugando, Wilson Gutiérrez impuso una nueva moda y le dio resultado. Los rojos fueron primeros y por ende obtuvieron el punto invisible para los cuadrangulares. En dicha fase ni siquiera necesitaron de este para clasificar a la fase definitiva, con 2 fechas de anticipación, los cardenales ya estaban acomodados y solo esperaban rival de la otra zona. En la definición del título, como en la semifinal de la Libertadores, la suerte le volvió a jugar en contra a los bogotanos, perdieron 0 – 2 en su casa y se tuvieron que conformar con ser subcampeones que, si tenemos en cuenta la cantidad de partidos que jugo en comparación a los otros equipos colombianos, es una victoria. Queda el sin sabor de perder 2 títulos, pero se puede decir que el deber esta cumplido.
Ahora es tiempo de decir ¡¡¡GRACIAS SANTA FE!!! Gracias por dejar el fútbol colombiano en un punto tan alto, gracias por imponer una nueva moda de juego, gracias por demostrarnos que con la unión y el esmero todo se puede lograr. ¿La recompensa? vendrá pronto, eso es seguro. Por ahora el equipo cardenal sigue con un proceso que le ha dado resultado y que de seguro los seguirá dando…
David Ricardo Guerrero