En la tercera fecha del Mundial Qatar 2026, Serbia y Suiza protagonizaron el cotejo más caliente y frenético de todos. Con la expectativa de lo que ocurriera entre Camerún y Brasil, los europeos se disputaban un cupo para ingresar a los octavos de final. Un partido de ‘pura chispa’, indudablemente.
PUBLICIDAD
Los suizos ya iban ganando 3-2 frente a los serbios, quienes parcialmente les tocaba decir adiós a la cita orbital en primera fase. Los dos se ‘mataban’ en el campo de juego, y había muchas probabilidades de alguna calentura en los banquillos.
Lea también: Las gravísimas denuncias de Luis Suárez que dejan mal parada a la FIFA
La polémica de Xhaka
En efecto, sobre los 70 minutos, sucedió lo esperado. Granit Xhaka, jugador y referente de Suiza, se despachó hacia los serbios con un gesto polémico. Los del banquillo rival, por supuesto, querían ‘comérselo’ vivo.
El árbitro intentó calmar las aguas, pero Xhaka quedó muy mal parado. Las cámaras lo alcanzaron a enfocar:
Ya sobre el final del partido, en tiempo de reposición, una calentura entre el propio Xhaka y Nikola Milenković, defensor de Serbia, provocó los nervios y la alta tensión. La rivalidad entre países es muy alta, demostrándose así en el campo de juego.