Yuki Honda anotó uno de los autogoles más bellos de los últimos tiempos en el fútbol mundial cuando la picó por encima de su portero con una gran precisión desde unos 30 metros en el fútbol japonés. Algo de lo que el protagonista no se siente muy orgulloso.
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La curiosa acción se dio en la jornada 24 de la J. League en el duelo en el que Kyoto Sanga FC cayó en casa 1-2 ante Kashiwa Reysol, en un juego en el que el autogol desequilibró la balanza.
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Yuki Honda y un autogol de gran factura
Bien dice el adagio popular del fútbol que no hay autogol feo, pero este casi que se puede considerar un autentico autogolazo.
Con su equipo ganando 1-0, Honda corrió para evitar un ataque rival y tras la presión del atacante del Kashiwa que lo apuraba en velocidad, punteó la pelota con intención de jugar con su portero.
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Lo que no midió Yuki fue que Naoto Kamifukumoto estaba unos metros adelantado y por no querer que les cobraran indirecto por una devolución, trató de despejar con su cabeza, pero él sí que midió mal.
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La pelota bañó al portero local y se metió en el fondo de la red. Nadie lo podía creer y la cara de Kamifukumoto lo decía todo, quería llorar.
Para completar la mala suerte del Kyoto Sanga, en el minuto 98 llegó un agónico gol de Yuki Muto que le dio la victoria al conjunto visitante.
El triunfo le sirvió al Kashiwa para ponerse segundo en la tabla de posiciones, detrás del Yokohama FM.
