Previo al sorteo de los octavos de final para la Copa Sudamericana y Libertadores, desde la Conmebol oficializaron una campaña llamada ‘¡BASTA! - No más racismo en el fútbol”, considerando inaceptable cualquier manifestación de racismo en contra de los jugadores y clubes.
A partir de ello, se anunciaron cambios en el código disciplinario para sancionar duramente a quienes sean implicados en actos discriminatorios.
Por ejemplo, cualquier jugador u oficial que atente contra dichos principios, “será suspendido por un mínimo de cinco partidos o por un periodo de tiempo mínimo de dos meses”, anunció la Confederación.
Así mismo, si hay algún miembro asociado o aficionados que insulten a otras personas por motivos de color de piel, raza, sexo u orientación sexual, se recibirá una multa de al menos 100.000 dólares. “Asimismo, el Órgano Judicial competente podrá imponer la sanción de jugar uno o varios partidos a puerta cerrada o el cierre parcial del estadio”.
“La CONMEBOL exhorta en cooperar con nuestro esfuerzo, y en especial a los actores del fútbol sudamericano a redoblar esfuerzos para erradicar el racismo y otras formas de violencia”, señaló el comunicado.
Se contempla que dichas variaciones al código disciplinario se efectúen a partir de la fecha, sin excepciones ni excusas para los clubes que incurran en estas acciones.
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