El Polideportivo Sur se colmó de hinchas del DIM para el Clásico Paisa. El Atanasio Girardot no estaba apto para un cotejo de fútbol, dada la coyuntura del espectáculo musical para la noche.
El primer tiempo no tuvo muchas emociones. El ‘Poderoso’ tuvo la batuta en las pocas arremetidas al arco rival, aunque el juego no era del deleite para el hincha. El equilibrio táctico entre los dos equipos impidió alguna sorpresa.
En cuanto a la única emoción clara que tuvo el partido, fue el gol anulado a Giovanni Moreno sobre los 30 minutos. Dorlan Pabón había tirado un fenomenal centro para Gio, quien empujó la pelota con la testa hacia la red; sin embargo, el VAR le dio la orden a Edilson Ariza de anular el tanto, dado que el extremo derecho estaba en posición irregular.
La solidez defensiva de Nacional se hacía notar, pero la casi nula producción en ataque llamaba la atención. Ya para el segundo tiempo, con más ganas que fútbol, los dos conjuntos intentaban abrir el partido.
Los Verdolagas iban a sufrir de un durísimo golpe: la expulsión a Giovanni Moreno tras ver su segunda tarjeta amarilla. Sobre los 56 minutos, el atacante se fue del campo escoltado por la policía, dado que los hinchas del DIM le lanzaban botellazos.
Y como si fuera poco, también echaban del campo a Dorlan Pabón a los ocho minutos después por la misma causa. El comportamiento disciplinario de los visitantes dejaba muchísimo por desear, recibiendo al menos ocho amarillas en el cotejo; sin embargo, no se descarta que los jugadores buscaban limpiar sus sanciones.
El partido de Nacional se resumía en eso: chocar y luchar; por su parte, el DIM con el empate ya estaba clasificado matemáticamente a la siguiente ronda cuadrangular. Si hubo algún protagonismo importante en ataque, fue por los ‘Poderosos’, a pesar de las altas preocupaciones por no anotarle a un equipo con tanta inferioridad numérica.
La más clara del partido tuvo que llegar a los 77 minutos, cuando Jean Pineda sacude de media distancia con su pierna derecha, poniendo a volar a Kevin Mier en la zona superior del arco; además, tuvo otra voladota en el último suspiro.